Primero de todo Gemma, darte la enhorabuena por el esfuerzo que has hecho al escribir esta novela. La he leído con mucho interés y tengo que decirte que yo hubiera eliminado más de un 20%-25% en la fase de revisión.
Por poner un ejemplo de a lo que me refiero. En la escena en que Laura visita la tienda de la tarotista, ésta dice (los dos puntos son para identificar un salto de línea y no hacer esto larguísimo):
?(...) Estoy segura de que ya ha tenido más de una experiencia paranormal. .. Laura negó con la cabeza. Aquella mujer la ponía más nerviosa a cada momento. ¿A qué venía todo aquello del contacto con los espíritus? ¿Qué era lo que pretendía? ¿Venderle un curso de espiritismo? ¿Reclutarla para una secta? El aroma del incienso parecía intensificarse e inundarlo todo, haciendo que sintiese un leve mareo. .. ?No, no he tenido ninguna. La verdad es que a mí nunca me habían atraído mucho estos temas ?respondió Laura tajante?. Como ya he dicho sólo quería saber para qué servía la piedra que me habían regalado.?
Yo lo hubiera dejado así : ?(...) ya ha tenido más de una experiencia paranormal. .. Laura negó con la cabeza. El aroma del incienso parecía intensificarse e inundarlo todo, haciendo que sintiese un leve mareo. .. ?La verdad es que a mí nunca me habían atraído mucho estos temas.?
No quiero decir que sea mejor, pero sí que no se pierde nada y mejora en mucho la fluidez de la lectura. Ya sabíamos lo que hacía Laura en la tienda. Ya la conocemos de los primeros capítulos; no es necesario meterse constantemente en sus pensamientos. La tarotista introduce la idea de que ella puede comunicarse con los muertos (la pena es que luego creo que no lo explotas suficiente ni tampoco regresas al personaje de la tarotista, ¿por qué?). Si querías que Laura respondiera de forma tajante de verdad, que hubiera dicho, simplemente, ?no?. A lo largo del diálogo podemos darnos cuenta por la forma en que responde si está cómoda o incómoda con la situación.
De hecho, en algún momento, fuí saltando párrafos y mi interés por leer tu obra aumentó. Interferir demasiado en la narración en un intento de ayudar al lector a comprender lo que está pasando es como decirnos que lo que ocurre en la escena misma es incompleto o no está bien planteado. Y me parece que tu forma de escribir es buena y no necesita de tanto "barroquismo".
Cortando y cortando conseguirás que tu narración sea más fluida permitiendo que el lector se introduzca más rápidamente en la evolución de la trama. Tus personajes son interesantes, pero, de nuevo, si están completos en tu cabeza, déjalos que vivan dentro de la historia, que se muevan, que hablen, que actúen y reaccionen.
Otro problema que he tenido ha sido descubrir una historia poco original. Me gustó la posibilidad de que introdujeras elementos sobrenaturales, como ya he dicho, pero no sé por qué no has querido o podido explotarlos. Creas intriga alrededor de la investigación del cráneo, etc, (que evoluciona demasiado lentamente, en mi opinión) para que, al final, lo que nos permite saber qué es lo que pasó ¿se haga a través de un diario? Resta fuerza al trabajo que están realizando y que es, a la postre, lo que la motiva a trabajar con su amiga.
La sorpresa final, al final, no lo es tanto porque se intuye desde el principio lo que ocurre con ese personaje (no lo digo para no destripárselo a nadie). :-) Parece que no tenías el menor interés en ocultar la verdad, pero en este tipo de historias creo que es fundamental. Si luego quieres rizar el rizo e ir más allá, fabuloso, porque el mayor estímulo para un escritor es descubrir hasta dónde puede llegar con sus historias, hasta qué punto exprimir a sus personajes.
Y, por cierto, la sinopsis de tu otra novela me ha parecido fabulosa. ¿Reflejará luego la historia la emoción que transmites en esa sinopsis? ¿Has explotado los elementos que describes y que la hacen tan interesante? Tengo que leerla. :-)
Destaco tu buena escritura, los detalles de la investigación (las marcas en el cuello, el estudio forense, etc) y también determinadas escenas con mucha fuerza como la del bosque y el campanario o, precisamente, el primero encuentro entre Ander y Laura.
Enhorabuena otra vez.