Escritores

Eugenio, gracias por leer la novela y tu comentario. Sobre "noche de autos": ahora no sé si fue una licencia, un error del auto-corrector, o uno tiene sus límites...
Repito, gracias.

A Julio Lemos,

" Plantado en un puerto mirando un velero sobrepasar la bocana? No sabes lo que me alegro que hayas llegado hasta ese puerto. Hacía tiempo que nadie leía la novela y menos que fuese alguien tan perspicaz para darse cuenta de lo que no se cuenta. Como tú bien indicas "meter la mano en el campo de la ética y conservarla? no es fácil, "perderla sucede cuando se miente"; sobre esto último deja que me defienda.
Los cuadernos del NIÑO QUE HABLABA CON LAS HORMIGAS que no se desvelan en esta primera parte de la novela, están por escribir; pensé que más de quinientas hojas son insufrible, mas tratándose de la temática que esconde el relato. Uno de los cuadernos pendientes, efectivamente, trata de la ética, y si te soy sincero tengo muchos apuntes y retales para retomar lo que no acabe, pero en estos cuatro años que hace que termine la primera parte de la novela han acontecido fenómenos tan inesperados que me han hecho frenar en mi propósito.
En primer fenómeno es que la humanidad ha perdido la mano izquierdo. Sí. Me refiero a esa mano izquierda con la que expresamos el talante. No sé tú si lo has notado, pero yo veo que la mayoría van por la vida con una sola mano; la otra sólo la utilizamos para taparnos la nariz: no vaya a ser que los que sufren la desgracia de guerras y miserias huelan mal y nos fastidien.
Otro fenómeno es que el hombre está en pleno proceso o cambio evolutivo, como si otra piel, negra, dura (puede que como la de las hormigas) nos envuelve y quiere que soportemos un mundo con líderes trasnochados, carentes de gracia, dispuestos ha dividir con muros después de haberse hecho fortunas con aquello de la globalización.
En fin. Estoy en ello. Pero puede que sea mejor quedarme como tú, plantado en el muelle esperando.

Julio. Gracias por haber leído mi novela. Y sobre conservar la mano... ya ves unos con miedos, y otros con la mano cogida a la nariz.

Un cordial saludo.
PEPE FORTMON

Mario, gracias por leer la novela y por tus comentarios. Como bien dices hay momentos que la novela cuenta seguir el argumento, sobre todo en la parte epistolar. No sé si el tema lo exigía o no, pero ciertos temas, o te explayas o solo dejas unas ideas sin fondo ni contenido.
Es una novela para lectores contumaces, y sin dudas tú eres uno de estos.
Repito, gracias.
Ah!. Soc de ¡Ché, tú! De la terreta...

Juan, gracias por leer la obra y tus comentarios. Sé que no es una novela fácil, intenta esperimentar el ensayo novelado, y hay momentos donde lo osado es seguir leyendo. Repito gracias por serlo.
Alex escribió seis cuadernos, y faltan dos para desarrollar. El quinto le doy título, y no me atrevo con el: la ética es un campo tan profundo que meter la mano garantiza quedarte manco. Y el sexto sería tratar de organizar el hormiguero humano. ¿Cómo lo ves? Jodido ¿no?
Saludos.

A J. Montero. Qué puntería la tuya. Efectivamente me decidí a escribir esta novela, una parte narrada y la otra epistolar, gracias a Jostein Garder, y su novela EL MUNDO DE SOFÍA. Me alegra que te haya gustado. Gracias y un cordial saludo.

Sergi GRACIAS por leer y comentar la novela. Te recomiendo que también leas SUEÑOS DE UN INSOMNE. Hablamos. Un saludo.

Gracias Agustín por leer la novela y tus comentarios. Reconozco que la parte epistolar de la novela en ocasiones es densa en contenidos y pude llegar a ser pesada y pedante. Intente que el personaje de Alex, El Niño que hablaba con las hormigas, el lector lo percibiera como lo que es, una mente privilegiada hasta límites divinos, que tiene una misió, giar al hombre en el necesario camino que va de la era del conocimiento a la de la inteligencia.
Saludos y repito, gracias.

Gracias por tu comentario y la valoración de la novela. Lo que más valoro es que hayas entendido el fondo de la novela. Repito. Gracias.

Moltes gràcies Ferrant,
Savia que tens molta imaginación, peró no poders adivinatoris. Efectivamente, l'estil de la novel.la està molt influenciada per Eduardo Mendoza.

Salutacions.

Juanmi, gracias por leer la novela, y tus comentarios. Lo que más valoro y me anima, es tu último frase:"estuve 4 días muy entretenido".
Repito, gracias.